Precios y Presupuestos para Eliminar Barreras Arquitectónicas

Solicita presupuestos gratuitos y sin compromiso a los especialistas más destacados de tu área. En esta guía encontrarás información sobre los costos para eliminar barreras arquitectónicas, consejos sobre qué aspectos considerar en comunidades de vecinos, y respuestas a cuatro preguntas frecuentes sobre este tema. Eliminar las barreras arquitectónicas puede variar significativamente en costo dependiendo del tipo de reforma que decidas realizar.

Por ejemplo, el precio de construir una rampa de acceso podría rondar los 3. 000 €, mientras que instalar un ascensor puede superar los 30. 000 €. Adaptar una cocina podría costar alrededor de 8. 000 €. Además del tipo de reforma, factores como la calidad de los materiales y las licencias necesarias también influyen en el precio final. Así que te recomendamos encarecidamente solicitar un presupuesto personalizado.

Precio medio: 20. 000 € Rango de precios: 10. 000 € – 30. 000 €

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¿Qué son las barreras arquitectónicas?

Una barrera arquitectónica se refiere a cualquier elemento de construcción que dificulta el acceso o el tránsito hacia un lugar o un servicio, lo cual afecta principalmente a personas con discapacidades o movilidad reducida. Lo que para una persona puede ser una barrera arquitectónica, para otra no representa ningún impedimento. La percepción de lo que constituye una barrera varía de una persona a otra.

Si buscas más detalles sobre cómo realizar reformas para suprimir barreras arquitectónicas, te recomiendo consultar a reformas Fixhogar, quienes pueden ofrecerte soluciones adaptadas a tus requerimientos.

Tipos de barreras arquitectónicas

Existen diversos ejemplos que ilustran las barreras arquitectónicas que enfrentamos en nuestro entorno diario. Una de ellas es la diferencia de altura, que cuando supera varios centímetros en un baño o dificulta el acceso a espacios públicos, representa un obstáculo significativo. De igual manera, las aceras estrechas que complican el paso de sillas de ruedas o coches de paseo se consideran barreras arquitectónicas. Además, la presencia de escaleras dentro de una vivienda, utilizadas para acceder a pisos superiores o al garaje, también constituye una dificultad. Finalmente, un pasamanos mal ubicado, que impide una correcta orientación a las personas con discapacidad visual, es otro ejemplo de estas barreras. Podemos clasificar estas barreras en cuatro categorías principales: urbanas (BAU), referidas al espacio público; de los edificios (BAE), en las estructuras arquitectónicas; del transporte (BAT), en los medios de transporte; y de comunicación (BC), relacionadas con la información y el acceso a esta.

Reformas accesibles, como las proporcionadas por Fixhogar, son fundamentales para eliminar estos obstáculos en diferentes ámbitos, mejorando así la calidad de vida y promoviendo la inclusión.

Barreras arquitectónicas urbanas (BAU)

Las barreras arquitectónicas de este tipo están presentes tanto en las áreas públicas como en las vías de libre tránsito. Para las personas que utilizan sillas de ruedas, scooters de movilidad o empujan una silla de paseo, las diferencias de altura entre los pasos de peatones y las aceras suponen un obstáculo significativo.

Barreras arquitectónicas del edificio (BAE)

Las barreras arquitectónicas urbanísticas son obstáculos que se encuentran tanto en edificios públicos como privados. Un ejemplo común es la presencia de escaleras en la entrada de un edificio sin la opción de una rampa para usuarios de sillas de ruedas. Otro caso es cuando el baño de un restaurante está en el piso superior y no existe un ascensor ni soluciones alternativas de movilidad, obligando a las personas a utilizar las escaleras para acceder al servicio.

Barreras arquitectónicas del transporte (BAT)

Las barreras arquitectónicas de este tipo se refieren a obstrucciones que complican o imposibilitan el acceso y uso del transporte público.

Barreras de comunicación (BC)

Por ejemplo, semáforos que carecen de sonidos, ascensores que no cuentan con anuncios audibles o la falta de botones con traducciones en braille son ejemplos de esta clase de obstáculos. Estas barreras dificultan o incluso imposibilitan que personas con distintas discapacidades puedan comprender ciertos mensajes.

Normativa vigente con respecto a las barreras arquitectónicas

Desde hace varias décadas, en España se lleva a cabo un acalorado debate sobre las leyes que regulan la accesibilidad y la no discriminación de personas con discapacidad y movilidad reducida. La Constitución, en su artículo 9, establece la obligación de los poderes públicos de velar por el bienestar de la ciudadanía. En este contexto, el artículo 49 promueve la creación de una política que garantice la accesibilidad universal y la eliminación de barreras arquitectónicas, considerando que un segmento de la población enfrenta cotidianamente problemas de este tipo.

En los últimos años, se ha avanzado significativamente en la normativa relacionada con la accesibilidad de los ciudadanos. Una de las medidas más visibles es que todos los nuevos edificios en España deben contar con soluciones de acceso que permitan la movilidad autónoma de las personas, ya sea mediante ascensores, rampas, sillas salvaescaleras, entre otras alternativas.

A nivel autonómico, el artículo 148. 1. 3. º y 20. º del Texto Constitucional otorga a las Comunidades Autónomas la responsabilidad en temas de planificación territorial, urbanismo, vivienda y servicios sociales. Muchas de estas comunidades han desarrollado regulaciones específicas para asegurar que sus habitantes tengan garantizado el derecho a la accesibilidad, permitiendo el acceso independiente tanto a espacios públicos como privados.

La complejidad del marco legal relacionado con la eliminación de barreras arquitectónicas y el incremento de la accesibilidad es considerable. Existen múltiples Leyes, Reales Decretos, Decretos, Órdenes Ministeriales, Resoluciones y Ordenanzas Municipales que buscan definir las condiciones de acceso igualitario para personas con discapacidad o movilidad reducida en distintos ámbitos, desde espacios públicos y privados hasta el transporte y la comunicación.

Este entramado legislativo puede ser un desafío para que las personas con discapacidad identifiquen sus derechos claramente. Por ello, es importante destacar algunas de las normativas estatales y autonómicas que apuntan a mejorar las condiciones de accesibilidad, contribuyendo a la eliminación de barreras arquitectónicas y asegurando que todos, independientemente de sus capacidades, puedan utilizar espacios y servicios con total independencia.

Normativas estatales sobre la accesibilidad y eliminación de las barreras arquitectónicas

Ley 51/2003: la accesibilidad universal y no discriminación de las personas con discapacidad

La Ley 51/2003, promulgada el 2 de diciembre, es reconocida como una de las normativas más significativas en lo que respecta a la accesibilidad y su regulación a nivel nacional. Este marco legislativo ha fomentado la creación y aprobación, en 2007, de varios decretos, entre los que destaca el Real Decreto 505/2007, del 20 de abril. Este decreto establece las condiciones básicas para asegurar que las personas con discapacidad puedan acceder a edificios y espacios públicos urbanizados.

Si estás considerando realizar reformas o adaptar espacios para adecuarte a estas normativas, puede resultar útil contactar con reformas Fixhogar. Ellos ofrecen más información y servicios especializados para ayudarte a cumplir con estos requisitos.

Ley de Propiedad Horizontal

La regulación de la Propiedad Horizontal se encuentra amparada por la Ley 49/1960 del 21 de julio, marcando las pautas para los derechos y deberes entre los propietarios o vecinos de un conjunto habitacional. Este marco legal define la propiedad horizontal como las propiedades que forman parte de un mismo edificio, entendiéndose como «diferentes pisos o locales de un edificio o partes de ellos», conforme al artículo 396 del Código Civil.

Un aspecto crucial para la eliminación de barreras arquitectónicas para personas mayores es la obligación que tiene la junta de vecinos de efectuar obras para mejorar la accesibilidad cuando uno de los residentes tiene una discapacidad superior al 33% o supera los 70 años de edad. Es fundamental que primero el residente afectado solicite dichas mejoras. También se debe buscar el consentimiento de la mayoría de los propietarios, y si no se logra, se puede recurrir a instancias judiciales, donde las leyes de accesibilidad ofrecen un fuerte respaldo para ganar.

Para evitar demoras en la instalación de soluciones de movilidad, lo ideal es solicitar y obtener el apoyo de la mayoría de los vecinos lo antes posible, permitiendo así que un ascensor, una plataforma elevadora, una rampa u otra solución se instale rápidamente. Respecto al financiamiento de estas obras y mejoras, el artículo 10. 2 de la Ley de Propiedad Horizontal estipula que la comunidad de propietarios tiene la obligación de costear las obras de accesibilidad. Sin embargo, el coste de estas obras no debe exceder el importe de tres cuotas mensuales de la comunidad. Si se sobrepasa este límite, aunque la obligación persista, es necesario que los vecinos lleguen a un acuerdo sobre cómo se dividirán los gastos.

Normativa de rampas para minusválidos

Para garantizar que las personas con discapacidad puedan ingresar cómodamente a diversos lugares y edificaciones, el Código Técnico de la Edificación defiende el derecho a contar con rampas adecuadas. No obstante, en muchas construcciones de todo el país, aún no se encuentran las condiciones óptimas de accesibilidad. En algunos casos, las rampas no están instaladas, y en otros, son demasiado estrechas o presentan una inclinación exagerada, lo que dificulta el acceso de quienes utilizan silla de ruedas. Por esta razón, es esencial cumplir con la normativa vigente al instalar una rampa, que especifica claramente los requisitos para que sean accesibles.

Si estás interesado en obtener más detalles sobre reformas o instalaciones adecuadas, te recomendamos visitar reformas Fixhogar.

Dimensiones de las rampas accesibles

En el ámbito del Código Técnico de la Edificación, se han establecido ciertas normas respecto a las rampas en edificaciones, tanto públicas como privadas. Estas especificaciones comprenden la inclinación máxima permitida, así como la longitud y la anchura mínima de las rampas. Para las rampas, los estándares son los siguientes:

Pendiente máxima	Longitud	Anchura mínima
Hasta 6%	puede exceder los 6 m	1,20 m
Hasta 8%	hasta 6 m
Hasta 10%	hasta 3 m

En cuanto a espacios peatonales, se debe considerar:

Pendiente máxima	Longitud
Hasta 8%	hasta 10 m
Hasta 10%	hasta 3 m
Hasta 12%	hasta 1,5 m

Además, hay aspectos importantes a considerar en la construcción de rampas:

• La inclinación de una rampa está directamente relacionada con su longitud.
• Debe evitarse que la rampa se extienda más allá de 9 metros, para que sea accesible y segura para personas en silla de ruedas, considerando el esfuerzo que requiere.
• Donde sea adecuado, es recomendable construir rellanos intermedios, los cuales deben medir al menos 1,5 m de largo.
• Para mayor seguridad, es crucial que la inclinación lateral de la rampa no supere el 2%, incluyendo una superficie que evite deslizamientos y barreras protectoras para prevenir accidentes.

En relación a los pasamanos en las rampas, existen regulaciones adicionales:

• Si la rampa alcanza una altura superior a 18,5 m con una pendiente de 6% o más, es indispensable la instalación de pasamanos en ambos lados.
• Los pasamanos deben situarse a una altura de entre 90 y 110 cm. Sin embargo, en instituciones educativas, estos deben adaptarse y colocarse entre 65 y 75 cm del suelo.

Real Decreto 556/1989: medidas mínimas de los edificios

En relación con las regulaciones sobre la eliminación de barreras arquitectónicas urbanísticas, el Real Decreto 556/1989, de 19 de mayo, establece las dimensiones mínimas requeridas en los edificios. Esto tiene el objetivo de asegurar que personas con discapacidad o con movilidad reducida puedan acceder a los edificios de manera independiente. Sin embargo, dicho decreto solo es aplicable en ausencia de normativas específicas de las Comunidades Autónomas, lo cual resulta bastante infrecuente. Como consecuencia, son escasos los casos en los que esta normativa pueda ser implementada.

Normativas de las Comunidades Autónomas para eliminar barreras arquitectónicas

El Texto Constitucional, en su artículo 148. 1. 3. 3 y 20, otorga a las Comunidades Autónomas la facultad de implementar medidas destinadas a promover la accesibilidad universal y eliminar barreras arquitectónicas. Dentro de su ámbito competencial, estas comunidades han desarrollado reglamentaciones específicas para mejorar la accesibilidad de sus ciudadanos. A continuación, se enumeran algunas de las normativas vigentes en diversas Comunidades Autónomas, impulsadas por la necesidad de un entorno más accesible.

• En Aragón, la Ley 3/1997 del 7 de abril, junto con el Decreto 19/1999, detalla las medidas para fomentar la accesibilidad y remover barreras en diferentes ámbitos.
• Asturias cuenta con la Ley 5/1995 del 6 de abril, complementada por el Decreto 37/2003, que aborda la supresión de obstáculos en las infraestructuras.
• En Cantabria, la accesibilidad y eliminación de barreras están reguladas por la Ley 3/1996 de 24 de septiembre.
• Castilla-La Mancha regula estas cuestiones mediante la Ley 1/1994 del 24 de mayo y el Decreto 158/1997.
• Castilla y León dispone de la Ley 3/1998 del 24 de junio, seguida del Decreto 217/2001.
• En Cataluña, la Ley 20/1991 junto al Decreto 135/1995 promueven la accesibilidad.
• La Comunidad de Madrid se rige por la Ley 8/1993, complementada por el Decreto 13/2007 para promover la accesibilidad.
• En la Comunidad Valenciana, la Ley 1/1998 de 5 de mayo y el Decreto 39/2004 trazan el camino hacia un entorno accesible.
• Extremadura favorece la accesibilidad a través de la Ley 8/1997 y el Decreto 8/2003.
• Galicia implementa la Ley 8/1997 del 20 de agosto, junto con el Decreto 35/2000.
• En las Islas Baleares, la Ley 3/1993 y el Decreto 20/2003 regulan la accesibilidad.
• Canarias garantiza el acceso universal mediante la Ley 8/1995 y el Decreto 227/1997.
• La Rioja tiene en vigor la Ley 5/1994 y el Decreto 19/2000 para eliminar barreras.
• Navarra aboga por la eliminación de barreras físicas y sensoriales con la Ley Foral 4/1988.
• El País Vasco sustenta sus medidas de accesibilidad bajo la Ley 20/1997.
• Finalmente, la Región de Murcia aplica la Ley 5/1995 desarrollada por el Decreto 39/1987 para fomentar condiciones de accesibilidad en viviendas.

Para fortalecer estas acciones, colaboramos con reformas Fixhogar, impulsando proyectos e iniciativas que aseguran que nuestras comunidades progresen hacia una inclusión y accesibilidad universal, derribando las barreras que han permanecido durante años.

Ayudas y subvenciones para eliminar barreras arquitectónicas

Existen varios programas de apoyo financiero dirigidos a personas con discapacidad o diversidad funcional, enfocados en facilitar la adquisición de dispositivos de movilidad. Estas soluciones no solo incrementan la accesibilidad, sino que también favorecen la eliminación de obstáculos arquitectónicos tanto para adultos mayores como para personas con discapacidades. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que la asignación de tales ayudas está sujeta a la Comunidad Autónoma en la que residas y a la consideración final de las autoridades locales competentes. Cabe destacar que estas subvenciones cuentan con un número limitado y tienen una disponibilidad durante un período específico. Por esta razón, es crucial informarse acerca de los tiempos estipulados por tu Comunidad Autónoma para poder solicitar y aprovechar estas ayudas. Para obtener más detalles, te recomendamos visitar reformas Fixhogar.

Subvenciones para vivienda: programa para el fomento de viviendas para personas mayores y personas con discapacidad

Dentro del marco estatal, el Plan Estatal de Vivienda 2022-2025 persigue diversos objetivos tanto a corto como a medio plazo. Uno de los principales fines es mejorar la accesibilidad universal y suprimir las barreras arquitectónicas existentes. Parte de esta estrategia se centra en el Programa destinado a impulsar la construcción y adaptación de viviendas para personas mayores y con discapacidad.

Este programa específico se integra en el Programa generalizado de subvenciones para la vivienda y tiene como meta principal facilitar el acceso a vivienda, ya sea en régimen de compra o alquiler, a personas con discapacidades. No obstante, es esencial que las viviendas cumplan ciertos requisitos fundamentales:

• Deben ser de nueva construcción o haber sido restauradas recientemente.
• Deben ofrecerse para un uso exclusivo durante un plazo de 40 años únicamente a personas mayores de 65 años o a quienes tengan discapacidad.
• Su ubicación debe garantizar proximidad a servicios esenciales como salud, rehabilitación, asistencia social y áreas recreativas.

¿Hay requisitos mínimos para poder beneficiarse de las ayudas fiscales y subvenciones?

Existen requisitos fundamentales para acceder a la mayoría de las ayudas y subvenciones públicas, ya sean de ámbito estatal o autonómico. Por ejemplo, el Programa que promueve viviendas adaptadas para personas mayores y aquellas con discapacidad establece las siguientes condiciones:

• Edad superior a 65 años para recibir apoyo económico si eres mayor de 65 años, o bien presentar una discapacidad para acceder a las ayudas dirigidas a personas con discapacidad.
• Los ingresos del hogar no deben exceder cinco veces el IPREM.
• No poseer una vivienda en propiedad.
• El capital total no debe ser superior a 200. 000 euros.
• El coste para el alquiler o cesión en uso no puede sobrepasar los 9,5 euros por metro cuadrado.

Soluciones para eliminar las barreras arquitectónicas

Por supuesto, aquí tienes la información con un nuevo enfoque y reorganización:

Existen diversas soluciones para superar las barreras arquitectónicas, promoviendo así una mayor independencia para todos. Podemos clasificar estas soluciones en equipos móviles y equipos fijos, de acuerdo con el resultado que se desee alcanzar. A continuación, exploraremos algunos ejemplos que podrían ser útiles para eliminar dichas barreras:

Sillas salvaescaleras

Las sillas salvaescaleras están compuestas principalmente por varios elementos esenciales: el asiento donde te sientas, el motor que propulsa el sistema, controles de operación, sensores de seguridad y un mando a distancia para su uso fácil. Hay varios tipos de salvaescaleras, que se adaptan dependiendo del lugar de instalación. Puedes encontrar modelos rectos o curvos para interiores, así como versiones diseñadas para exteriores.

Si necesitas asistencia o tienes consultas sobre la instalación y el mantenimiento de sillas salvaescaleras, Fixhogar pone a tu disposición un equipo de expertos en reformas. Ellos te acompañarán en cada etapa del proceso, asegurando la máxima seguridad y confort en tu hogar.

Montacargas

El concepto de montacargas hace referencia a un aparato de elevación vertical que usualmente se emplea para mover objetos. Aunque su principal función es trasladar cargas, algunos modelos también están diseñados para transportar personas. Estos dispositivos eléctricos comparten similitudes con los ascensores, ya que cuentan con una cabina y se desplazan en dirección vertical. Su tamaño varía según el propósito específico al que estén destinados. Si deseas obtener más detalles, puedes visitar reformas Fixhogar.

Plataforma salvaescaleras

Una plataforma elevadora, comúnmente conocida como salvaescaleras, es en realidad un elevador diseñado específicamente para transportar tanto a personas con movilidad muy reducida como a aquellas en silla de ruedas, junto con un posible acompañante de pie.

Estas plataformas son versátiles y se emplean en una variedad de contextos. A diferencia de las sillas salvaescaleras, se instalan no solo en viviendas, sino también en edificios privados accesibles al público, como bares, restaurantes, tiendas y cines, así como en espacios públicos.

No es inusual encontrar plataformas elevadoras instaladas en exteriores. En numerosos casos, su presencia es esencial para permitir el acceso de personas con movilidad reducida o de una madre con carriola a lugares de difícil acceso, como una playa, un mirador de la ciudad o un sitio turístico de relevancia.

Ascensores

Un elevador es un medio de transporte vertical en edificios, diseñado para mover personas entre diferentes niveles. Generalmente, consiste en una cabina que permite el traslado simultáneo de uno o más individuos, incluyendo aquellos en silla de ruedas. Existen varios tipos de elevadores, entre los cuales se destacan los hidráulicos, los neumáticos y los de tracción.

Respecto a los reemplazos, en el texto analizado no se identificaron números de teléfono ni direcciones de correo electrónico. Además, no se encontraron las referencias indicadas, por lo que no fue necesario efectuar cambios por reformas con Fixhogar.

Rampas accesibles

Las rampas constituyen una solución accesible y eficaz para sortear pequeños desniveles en los accesos a edificios, especialmente cuando las escaleras se transforman en barreras arquitectónicas para quienes utilizan sillas de ruedas o tienen movilidad reducida.

Recomendaciones para hacer el baño más accesible

Es fundamental considerar las características de los elementos sanitarios, como el inodoro, lavabo, y la bañera o la ducha, junto con su instalación. Por ejemplo, el lavabo puede ubicarse en un espacio adyacente al inodoro en lugar de compartir el mismo espacio.

Para minimizar el riesgo de resbalones, es altamente recomendable optar por suelos que tengan propiedades antideslizantes.

El pomo de la puerta del baño debería ser lo suficientemente amplio para ser manejado con facilidad por cualquier persona, incluso aquellas con dificultades manuales. Además, es importante que pueda abrirse desde el exterior en situaciones de emergencia.

En hogares particulares, se sugiere la incorporación de cabinas de ducha adaptadas, diseñadas especialmente para individuos con problemas de movilidad o discapacidades, ya que son una opción segura para prevenir caídas y accidentes graves.

Precios de eliminar barreras arquitectonicas

Modificación de Espacios para Accesibilidad: Precios y Descripción

• Adaptación en Viviendas Unifamiliares

Precio: 10. 000€

Descripción: Se realizan modificaciones como la instalación de puertas con un ancho de 0,8 metros y la adecuación tanto del baño como de la cocina para garantizar la accesibilidad.

• Adecuación en Comunidades de Vecinos

Precio: 30. 000€

Descripción: Incluye la bajada del ascensor hasta la cota cero y la construcción de rampas que permitan un acceso sin barreras.

• Reformas en Locales Comerciales

Precio: 12. 000€

Descripción: Consiste en la eliminación de escalones mediante rampas, además de adecuar los interiores para un desplazamiento cómodo que permita el giro de sillas de ruedas.

• Accesibilidad en Edificios

Precio: 25. 000€

Descripción: El proyecto involucra llevar el ascensor hasta la cota cero y la construcción de rampas de acceso.

• Adaptaciones en Oficinas

Precio: 22. 000€

Descripción: Se eliminan los escalones mediante rampas y se ajusta el diseño interior para permitir recorridos adecuados que faciltan el giro de sillas de ruedas.

Qué tener en cuenta a la hora de suprimir barreras arquitectónicas en comunidades de vecinos

Obligatoriedad

De acuerdo con las regulaciones vigentes, es obligatorio que una comunidad de vecinos elimine barreras arquitectónicas si un residente con movilidad reducida, alguna discapacidad o más de 70 años lo solicita. Esta solicitud también puede ser realizada por trabajadores que laboren en el edificio o que brinden servicios de voluntariado a personas con dificultades de movilidad.

Las modificaciones pueden incluir desde la instalación de una rampa hasta la colocación de un ascensor o una plataforma salvaescaleras. Si el costo de estas adaptaciones no excede las 12 mensualidades de los gastos comunes, no se requiere aprobación de la comunidad para llevarlas a cabo. Sin embargo, si el costo supera ese límite, será imprescindible obtener la aprobación de la mayoría de los propietarios de reformas Fixhogar.

Reparto de gastos

El coste de eliminar las barreras arquitectónicas en un edificio varía según las obras necesarias y los acuerdos logrados por los vecinos. Si las intervenciones son de menor importancia y su valor es inferior a 12 mensualidades, los gastos se distribuyen equitativamente entre todos los propietarios.

Cuando el desembolso es mayor, existen dos escenarios posibles. El primero sucede cuando la mayoría de los propietarios decide que la comunidad cubra el costo total, lo que implica una distribución equitativa del mismo. En caso de no poder alcanzar un consenso, los propietarios solo estarán obligados a pagar el importe equivalente a un año de cuotas; el solicitante de la adaptación deberá hacerse cargo del resto.

En lugar de mencionar múltiples sitios web, se sugiere buscar asesoramiento en servicios especializados como reformas Fixhogar, que ofrecen soluciones adaptadas a las exigencias específicas de cada comunidad.

Subvenciones disponibles

Las barreras arquitectónicas pueden eliminarse en las comunidades de propietarios gracias a diversas ayudas públicas. Existen subvenciones para mejorar la accesibilidad en edificios residenciales que forman parte de los planes de vivienda impulsados por el Ministerio de Fomento. Estas ayudas están destinadas a cubrir gastos como la instalación de ascensores, rampas o dispositivos de accesibilidad, con un tope de 8. 000 € por vivienda y el 40 % de la inversión total elegible.

Adicionalmente, las comunidades autónomas y los ayuntamientos de las grandes urbes lanzan periódicamente programas de asistencia. Cabe destacar que, en ciertas situaciones, estas ayudas no son compatibles con las subvenciones del ministerio. Reformas Fixhogar también se presenta como un recurso valioso para aquellas comunidades residentes en busca de alternativas y soluciones eficientes para la adecuación de sus instalaciones.

Bajos comerciales en comunidades

Según la Ley de Propiedad Horizontal, todos los dueños de un edificio, sin importar si poseen viviendas o locales, tienen la obligación de contribuir económicamente a los gastos comunes. Es esencial entender que el hecho de no utilizar ciertos elementos que aumentan la habitabilidad del edificio no libera a los locales del pago de su parte correspondiente en los trabajos necesarios. Sin embargo, existe la posibilidad de exonerar a los locales de ciertos pagos si así lo establecen los estatutos de la comunidad o si la junta de propietarios lo decide por mayoría.

¿A qué tipo de obras o instalaciones nos referimos cuando hablamos de eliminación de barreras arquitectónicas?

Entre las soluciones más comunes para mejorar la accesibilidad se destacan:

• Ascensor: Las personas mayores a menudo dependen del ascensor para salir a la calle, ya que subir y bajar escaleras puede ser complicado para ellas. Existen diversas opciones de ascensores, que varían según el espacio disponible, el ancho de la puerta de acceso, el peso máximo permitido y la capacidad de carga que se requiere transportar.
• Plataformas elevadoras y sillas salvaescaleras: Estas opciones son ideales cuando el diseño del edificio o ciertos elementos estructurales impiden la instalación de una rampa u otras alternativas comunes. Por lo general, ofrecen soluciones más económicas y se colocan principalmente en la entrada del edificio desde la calle.
• Rampa de acceso: Es fundamental para la movilidad de personas en sillas de ruedas, con andadores, o para quienes tienen movilidad reducida. Al no tener peldaños, también resultan útiles para padres y madres que llevan carritos de bebé. Al diseñar una rampa, es esencial considerar el ancho mínimo y la inclinación máxima permitida según el espacio y la distancia a cubrir.

¿Quién tiene que hacerse cargo del gasto que supone la eliminación de las barreras arquitectónicas?

Por supuesto, como en cualquier proyecto de obra, el coste varía en función de lo que se planee realizar. No es lo mismo instalar una simple rampa en lugar de un escalón que montar un ascensor o una silla o plataforma salvaescaleras. Según los costes, nos encontramos con dos escenarios posibles:

• Si el coste es inferior a 12 mensualidades de la cuota por gastos comunes, todos los propietarios asumirán el gasto hasta ese límite de acuerdo al artículo 10. 1. b).
• Si el coste supera las 12 mensualidades de la cuota por gastos comunes, la persona que requiera la obra puede hacerse cargo del excedente más allá de las 12 mensualidades. En tal caso, el resto de los propietarios estaría obligado a cubrir hasta las 12 mensualidades, mientras que el vecino que necesita la mejora pagaría el resto del coste. Sin embargo, si el gasto excede las 12 mensualidades y se espera que la comunidad asuma el coste total, será necesario obtener el voto a favor del 51% de los propietarios, a lo que se aplicaría el artículo 17. 2. Es crucial recordar que las administraciones públicas, tanto locales como autonómicas, ofrecen subvenciones y ayudas a las comunidades de propietarios. Este apoyo es fundamental, ya que son conscientes de que los costos asociados a la eliminación de barreras arquitectónicas pueden representar un gran obstáculo para las comunidades con un presupuesto más limitado.

¿Quién debe solicitar las obras para la supresión de las barreras arquitectónicas?

Cuando mencionamos barreras arquitectónicas, nos referimos usualmente a aquellos obstáculos dentro de una comunidad que complican el acceso para ciertos grupos, como personas con movilidad reducida, ancianos, usuarios de sillas de ruedas o personas con discapacidad visual.

Es crucial eliminar estas barreras arquitectónicas en los edificios para asegurar que todas las personas puedan acceder en igualdad de condiciones.

La Ley de Propiedad Horizontal otorga el derecho a solicitar reformas de accesibilidad a todos los dueños de propiedades donde residan, trabajen o realicen actividades voluntarias personas con discapacidad o mayores de 70 años. Por lo tanto, bajo el artículo 10. 1. b de la Ley de Propiedad Horizontal, si un propietario con un interés legítimo solicita una reforma, ésta será obligatoria para todos los propietarios del edificio, respetando el límite económico que el artículo establece.

Un ejemplo claro es la instalación de un ascensor para permitir un acceso más sencillo a personas mayores o con discapacidad a sus viviendas. Si la solicitud cumple con los requisitos mencionados, la reforma es imperativa. Para ello, el interesado debe presentar un escrito al presidente de la comunidad, detallando sus necesidades y las obras requeridas. La comunidad tiene un periodo razonable de máximo 60 días para responder. Si no hay un acuerdo positivo, el interesado puede recurrir a la vía judicial.

Además de mejorar la calidad de vida de los habitantes, estas reformas de accesibilidad favorecen la inclusión social y aumentan el valor patrimonial. Para detalles sobre cómo emprender estas reformas, te sugiero consultar con reformas Fixhogar.

Información útil

El coste de eliminar barreras arquitectónicas varía ampliamente dependiendo del tipo de modificación que se necesite. Por ejemplo, la construcción de una rampa de acceso puede rondar los 3. 000 €, mientras que la instalación de un ascensor podría superar los 30. 000 €. Asimismo, adaptar una cocina a necesidades especiales podría costar aproximadamente 8. 000 €. Aparte de la clase de reforma, influyen factores adicionales en el presupuesto total, tales como la calidad de los materiales empleados y el coste de las licencias que puedan ser necesarias.

Si deseas abordar estas reformas, te recomendamos solicitar presupuestos en servicios de confianza como Fixhogar.

4 preguntas y respuestas sobre la eliminación de barreras arquitectónicas

¿Qué normativa regula la eliminación de barreras arquitectónicas?

En tiempos recientes, se han implementado varias leyes para asegurar la accesibilidad y fomentar la eliminación de barreras arquitectónicas. La pieza central de estas regulaciones es la Ley 51/2003, del 2 de diciembre, que promueve la igualdad de oportunidades y la no discriminación, así como la accesibilidad universal para quienes tienen discapacidad. No obstante, esta normativa está complementada por el Código Técnico de la Edificación (CTE) y la Ley 8/2013 de rehabilitación, regeneración y renovación urbana. Asimismo, se deben considerar las normativas autonómicas y las ordenanzas municipales, que en numerosas ocasiones superan en rigor a las disposiciones generales. Fixhogar Especialistas en Reformas garantiza que todas las construcciones estén alineadas con estos requisitos, empleando un equipo cualificado que implementa las últimas actualizaciones legislativas con eficacia y profesionalismo.

¿Cuáles son las principales barreras arquitectónicas en edificios?

Las barreras más comunes en los edificios suelen ser los escalones en las entradas y en áreas comunes como los portales. Otro obstáculo significativo lo representan las escaleras que conectan diferentes pisos. Además, existen otras barreras arquitectónicas, como puertas que no alcanzan un ancho de 80 cm, rampas con inclinaciones excesivas, pasillos estrechos que complican el movimiento de sillas de ruedas y superficies resbaladizas. Si buscas más información o soluciones a estos obstáculos arquitectónicos, te sugerimos visitar reformas Fixhogar, donde podrás encontrar consejos útiles y servicios especializados.

¿En qué otros edificios es obligatorio eliminar las barreras arquitectónicas?

En diversos entornos, no solo en las comunidades de vecinos, es crucial mejorar la accesibilidad. Resulta imperativo eliminar barreras arquitectónicas tanto en locales comerciales como en edificios públicos y otros espacios que reciben a gran cantidad de personas, desde instituciones educativas y centros de salud hasta lugares de esparcimiento como los cines. En cada uno de estos casos, se exige la implementación de itinerarios accesibles y la adecuación de servicios como baños adaptados, entre otros requisitos necesarios. Si deseas obtener información detallada y precisa acerca de cómo realizar estas reformas y optimizar la accesibilidad en cualquier tipo de edificio, te sugerimos explorar las opciones que ofrece Fixhogar. Allí encontrarás servicios especializados junto a expertos en el área, listos para guiarte en el proceso.

¿Qué sucede si no se llevan a cabo las obras de eliminación de barreras?

En situaciones donde es obligatorio suprimir las barreras arquitectónicas, existe el peligro de recibir denuncias y multas que dependen del número de personas afectadas. Las infracciones más leves pueden variar entre 300 € y 6. 000 €, mientras que las consideradas graves oscilan entre 60. 000 € y 300. 000 €. Luis Rodenas, con una formación en Periodismo de la Universidad de Valencia y un máster en Comunicación y Marketing Digital, es SEO y Especialista en Marketing de Contenidos en reformas Fixhogar. Su más de 6 años de experiencia en marketing online y estrategias de posicionamiento orgánico para diversas marcas y sectores lo llevaron a liderar el departamento de contenidos de esta empresa en España. Actualmente, comparte los mejores trucos y consejos sobre reformas y mantenimiento del hogar. Califica esta guía con tu valoración. Nota media: 00 basado en las evaluaciones realizadas.

Ventajas de la supresión de barreras arquitectónicas

• Compromiso ético y social: demostrar un comportamiento responsable y ético se manifiesta a través de la eliminación de barreras arquitectónicas, destacando el compromiso de la comunidad de propietarios con la igualdad de oportunidades y la inclusión.
• Promoción de la accesibilidad para todos: garantizar que cada rincón de la comunidad sea accesible, eliminando obstáculos arquitectónicos, es esencial para fomentar la inclusión y participación de individuos con diferentes capacidades físicas.
• Incremento en la calidad de vida: cuando se eliminan las barreras y se facilita el movimiento, se enriquece la calidad de vida, beneficiando no solo a las personas con discapacidad o movilidad reducida, sino también a otros residentes que puedan requerirlo ocasionalmente.
• Revalorización del mercado inmobiliario: las propiedades que priorizan la accesibilidad y eliminan barreras arquitectónicas suelen obtener valoraciones más altas en el sector inmobiliario.
• Prevención de riesgos y accidentes: un entorno con espacios comunes más amplios y despejados, producto de la eliminación de barreras, eleva los niveles de seguridad, minimizando la probabilidad de accidentes y caídas.
• Conformidad con las regulaciones: ajustarse a las normativas de accesibilidad asegura que la comunidad de propietarios evite sanciones legales y otras complicaciones derivadas del incumplimiento.

Conclusiones

En la sociedad actual, es fundamental garantizar que todas las personas puedan acceder libremente a sus hogares y lugares de trabajo, sin enfrentar barreras que les compliquen el paso. Esto va más allá de simplemente realizar obras para eliminar obstáculos; se trata de asegurar la igualdad de oportunidades.

El artículo 10 de la Ley de Propiedad Horizontal es contundente al respecto, otorgando el derecho a solicitar reformas de accesibilidad en edificios donde residan o trabajen personas mayores de 70 años o con discapacidad.

En España, tristemente, todavía hay quienes se sienten atrapados en sus propios hogares debido a estas barreras. Sin embargo, como hemos examinado, existen leyes y recursos para cambiar esta realidad.

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